Add parallel Print Page Options

Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.

Viviendo por la fe

Pero tenemos este tesoro en vasos de arcilla, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no procedente de nosotros;

que estamos atribulados en todo, mas no estrechados; en apuros, mas no desesperados;

Read full chapter

Bible Gateway Recommends